domingo, 29 de diciembre de 2013

Aunque tú ya lo sepas

Al principio no quise verlo ni sentirlo,
pero eso que había en la butaca,
era yo, y no, hoy tampoco estabas tú

Aunque tú ya lo sepas
te prometí el infinito y un poco más,
me drogué con las promesas que yo iba inventando
por cada uno de los deseos que se escurrieron de mis dedos

Aunque tú ya lo sepas, volamos,
volamos con las alas de todos los pájaros
que pueblan mi cabeza,
por un mundo de ciudades y sonrisas infinitas
que solo se acababan cuando te ibas a dormir
y yo tenía a bien
con quien soñar despierto

Aunque tú ya lo sepas, te tocaba,
como se tocan la esperanza y los sueños bonitos,
sin verte
pero sabiendo que tu jodida existencia
me hacía caminar
y aún así me sobró tacto para no olvidarte

Al final, ya ves,
no hemos hablado sin prisa muchas tardes
y en mi cama siempre es invierno desde que sé
que no vas a venir a ocuparla
con tus ojos llenos de utopías y silencios
con tus ojos ahora vacíos de mis versos

Ahora me queda la resaca de ese himno de ausencias,
donde el amor y el olvido duermen en camas separadas,
aunque tú ya lo sepas y seas, con perdón,
la ausencia de la ausencia
y ese es, te aseguro,mi peor de los presentes

Ahora me encuentro aquí;
cerveza en mano,mirada al cielo,
cantando el himno nacional de un estado emocional
en plena crisis,
me doy cuerda y me doy cuenta que nunca estuviste en realidad,
y ese es mi peor consuelo y mi mejor desgracia,
aunque tú, eso ya lo sepas




martes, 24 de diciembre de 2013

Putos cardinales

Me regalaron una brújula por Navidad. 


¿Este-Oeste?
Me preguntó el sur
 antes de perder el norte


Uno:
Me fui al este, por tu corazón a la izquierda, latiendo, bombeando un atentado vital contra la nada, llamando poesía a cada frase que escribí en tu espalda.

Dos:
Partí al oeste; sombrero "Estilo western" y un revolver a una bala de dispararme. En esta cama hay sitio para los dos. Pero ya no quedan balas estoy dispuesto a salvarme.

Tres:
Corrí al sur buscando el norte. Imposible salir bien parado. Las musas por aquí vuelan rápido cuando están cerca del poeta, por eso nunca quise ser poeta. Por eso me abracé a tus caderas y precipicios hasta quemar el sol de estas tierras.

Cuatro:
Fin del viaje. Me voy al norte. Me voy a casa con más hambre que miedo. Me voy con más rutinas que dudas. Tu boca ahí, bien arriba, en lo más alto (que es mi oído) susurra “Te quiero”

¿Este-Oeste?
¿Norte o sur?

Nunca supe aprenderme los putos cardinales,
pero ahora cuento: Uno, dos, tres, cuatro…
te beso y pierdo el norte.

                                             Pueden quedarse con la brújula.

martes, 17 de diciembre de 2013

Quédome; canciu de huída (o resistencia)

Güei de nuevu
pienso en dir lloñe,
lloñe de la mio casa,
de la mio xente,
del mio llar y los mios collacios

Nun-yos di la opción de quereme más
porque dalgunos
-quiciabes  munchos-
falláronme
y caminé solu pelos praos
col orbayu  
amestándose  
coles mios llárimes

Alcordéme de la playa
fundíme ellí onde se xunten la arena cola mar
y perdime de nuevu

Entós garré la maleta polos cuernos
enllenela d’ ausencia hasta vaciala,
pol camin hacia dalgún llugar qu’ inda desconozco

Y dalgún día quiciabes,
esi llugar será mio xente,
mio llar,
mios collacios,

dalgún dia

Mientres tantu quédame facer camín
construir llares pol mundiu
pa que xele menos la mio alma
cuando camine solu
polos peores sitios,

sin naide

Mientres tantu la mio xente,
la mio casa,
los mios collacios,
el mio llar
ye esti
Y per momentu, quédome
porque se que volveré a huir


viernes, 13 de diciembre de 2013

A cara de perro

Las musas también saben ladrar por muy  perro que te pongas
 y los poemas no siempre son de quien  los escribe
por mucho valor que le eches, antes de intentar  comerle la boca.

A veces el poeta solo tiene que asentir
y copiar humildemente lo que le cuentan sus caderas
pobre iluso; el poeta, pobre impostor; el junta-letras

No le llames poeta,
llámale iluso:
si no ha probado esos labios de cerveza
si no ha caído tan abajo como para lamer sus gemidos,
o tocado el cielo con la yema de sus dedos,
quiero decir, su cuerpo,
 que es la puta primavera en pleno enero

No le llames poeta,
llámalo idiota:
si no se ha perdido hasta buscarla,
si no se ha encontrado hasta perderse,
en cada jodido “No pares”,
donde Ella  olvida cada una de sus dudas

 No lo llames artista,
llámalo ingenuo:
si el artista agarrado su pelo,
como quien se agarra a un clavo ardiendo
no se ha dejado caer por sus infiernos
si el artista subido a ese arcoíris de sudor y lluvia
no se ha caído por sus senos, hasta abrazarse rendidos
como se abrazan las nubes después de las tormentas

No le digas jamás a este impostor que ha hecho arte
si no ha conseguido
proteger contra viento y marea
la fragilidad de su sonrisa
que por mucho que lo niegue
es a lo único que aspira

Pues sí, poeta
las musas han aprendido a ladrar
y mejor aún,  han aprendido a volar
sin que ninguno de nosotros les haya dado alas
y no creo que haya nada más grande

Así que ya lo sabes
este poema para nada es de quien lo escribe,
este poema, con perdón,  es de Ella,
por muy perro que te pongas
y sea yo quien le coma la boca



domingo, 8 de diciembre de 2013

Imposible, Jim, Imposible

Ante todas las cosas, por encima de todas las religiones y las patrias; Lo que soy es un mitómano. Venero a los iconos en blanco y negro, tengo  fe ciega en los videntes de la nada, esos  que pueblan mis paredes, esos que mantienen hasta el final el silencio de sus voces en mis auriculares. Ya sabéis; Ellos hasta arriba de heroína, Ellos hasta el culo de “María” o de otra de esas droga con nombre de mujer.

Supongo que será porque en realidad soy muy “de pueblo”. A los de provincias nos gustan las capitales, a los que no tenemos talento nos gusta ver las fotos de Dylan con su pose de estrella. Somos así de mediocres, soy así de mediocre. Kurt Cobain (en blanco y negro) toca su guitarra en mi cuarto y Sabina habla por mí demasiadas veces.

Suena The End, por enésima vez, respiro, escribo, respiro, transcribo.  Huele a lo que huelen los finales, los finales que acarician suavemente los principios de algo mágico. Los principios que ya no cuentan, los principios que se superponen los unos a los otros. La libertad por encima de todo y de todos. The west is the best. Al oeste de mi dudas, al instante mis precipicios. Respiro. Vuelvo a ser yo.

Hoy, me dicen, Jim Morrison cumpliría 70 años. Figura magnética, inspiradora. Mito del rock y la poesía. Icono puesto en paredes y carpetas hasta la saciedad. Alimento y pasto de todo tipo de mentes “outsiders”. Si, lo admito, su mirada todavía  tiene algo de oscuro y de insultante que me hace difícil observarla en esas fotos icónicas demasiado tiempo. Cada acorde es puro Blues, poesía y LSD. Es imposible volver a escuchar nada parecido. “Imposible” me repito “Imposible”.

Pero lo extraño de todo esto, es que yo que soy incapaz de recordar la fecha de cumpleaños de prácticamente nadie y escribo sobre Jim Morrison. Santísima hipocresía la del Arte, santísima Mierda. Pero soy un mitómano. Hoy es Morrison, mañana será Dylan, ayer fue Lou Reed. Mitos, mitos y mitos para rellenar los huecos que nos faltan. Mitos para señalarlos con el dedo y recordar que es” Imposible” igualarlos. ” Imposible” me digo “Imposible”.

Y por mucho que nos extrañe los mitos se caen, se caen por ser mitos, se caen por su propio peso que es el nuestro. Gritamos sus nombres, pusimos el mito en el cielo y su caída nos dolió demasiado. Así de injusto es el mundo que no parará de girar y no parará de escupirnos a la cara que cada día la gente muere y nace. Cada día algún hombre se mirará sin camiseta frente al espejo y se creerá Jim Morrison y lo cierto es que será imposible. “Imposible” aceptémoslo “Imposible”…

viernes, 29 de noviembre de 2013

Y el vientu calla (Traducción al asturiano del poema "Y el viento calla")

Retumben nos mios oyios silencios
que son lápides de palombes
volando pa fuxir de lo que nun foron
 corriendo per autopistes incendiaries
que solo son cortaes por barricaes
por cuerpos rindíos, pol sangre d'un pueblu
que nun s'atreve malapenes a dicir que ye un pueblu
 y el vientu calla

Glaya, vocingla, esgarrápame los tímpanos el tiempu
tictac, tic tac, aguyes del reló, aguyes d'oru 
pa que rellumen los vencedores de la hestoria
coles sos vides bañaes en plata, colos sos versos berrones
falando d'amor y besos porque lo demás sóbra-yos
porque nun-yos fai falta recordar quienes son sos pas
p'abrir les sos puerques boques
y el vientu calla

Acordes que se meten nos mios oyíos
son los sos cantares que enllenen la radio
de la so llibertá plastificada y artificiosa
pa canta-y a “Sally” y a moces que nun esisten
mientres al so llau la so vecina, llora solitaria,
 mientres l'home blancu vuelve a golpea-y
y el vientu calla

 Amburen les cais y ambura la selva,
 quemen los silencios onde non tien cabida
 un sufrimientu dichu en zulú
un dolor que tien collor, un collor que tien dolor
y tien culpables, meyor dichu, responsables
que cola so indiferencia incolora
enllenen les cárceles d'homes nobles
y el vientu calla

Desfaise'l nuesu mundu,
 pa construyir el suyu
asina se constrúi'l apartheid
construyendo murios
llevantando escopetes
alzando al home blancu a la categoría del gochu
y el vientu calla

Nun me llames blancu
nun me llames Europa
Si yo formo parte del
so puercu mundu
de la so puerca mafia incolora y ruin
yo soi de los de abaxo y embaxo me quedo

 Anque cai'lvientu
anque queme'l sol
yo soi ellos y ellos son yo
que se joda'l vientu
que yá va trayer
los suaños
que va tirar los murios
y al fin vamos ser llibres

lunes, 25 de noviembre de 2013

Siempre hay un "roto"

Nunca encontré ningún motivo para romper mis juguetes cuando era niño. Siempre pensé que se merecían un motivo mejor que yo para romperse y por eso luché siempre por mantener lo mejor posible su integridad.

Luego cuando me hice un poco más mayor (no mucho), me encontré con mucha gente que no tuvo nunca ningún problema en tratar al resto como juguetes y mucho menos en romperlos si les apetecía.

He de admitir que desde entonces siento una gran simpatía por las víctimas de estos impunes terroristas emocionales. Al final me he ido rodeando de gente un poco rota que en más de una ocasión me cortó con sus pedazos hasta hacerme sentir mal.

Pasó el tiempo y no por las heridas dejé de ser un soñador. No he temido llevarme a la cama sueños que ya venían rotos de serie  y que de alguna manera habían acabado con la paciencia de otros. Qué putada eso de sentir con el bolígrafo en la mano y la astilla  ajena en el corazón. Qué putada…

Pero también he de confesaros que si algo me ha ayudado a conservar mis sueños estúpidos han sido algunos libros. Libros viejos y rotos por alguna parte. Con los libros viejos y rotos me ha pasado lo mismo que con las personas viejas y rotas; son los que me han marcado. Esos son lo que me han salvado realmente  de las de más cien noches de las que ya nos hablo Gabo.

Así que por favor no vengas ahora a decirme que me busque otra mitad, no vengas a decirme que me complete nada ni nadie. No vengas a hablarme de sueños o de juguetes rotos en los que nadie cree. Por favor no vengas a hablar de treguas que me callen. Háblame del viejo roto, del soñador que me llevó a Macondo y hoy ya no lo recuerda.


viernes, 22 de noviembre de 2013

Imsomnios

“Prefiero cumplir más deseos que sueños… por si las pesadillas” María Isabel GS

Que mis noches no estaban hechas al invierno
pero aún así aprendieron a fingir el sueño
para no llorarle a gritos
a mis tristes pesadillas
temblando de miedo,
sudando gloria

Que no, que mis mantas
no tienen tela que cortar
para rasgarme a menos cinco grados,
a las cuatro menos cinco
de esta noche interminable
-sin mí, ni nada parecido-

Que mis ojos quisieran salirse de sus órbitas
ante las ojeras de un pasado 
que vuelve para dejarme
sin co-razones de esas,
la chica de los sueños rotos,
la chica de los ojos tristes…

pero ya no quedan nostalgias de esas,
pero ya no quedan rutas a pie
por esta playa sin sirenas

 Que el Norte se salió de mi brújula
y nunca dejé de perderme,
nunca dejé de buscarte,
hasta encontrarme

Que este mar congela el ruido 
y en el norte nos baña el desencanto
en cada olejae,
en cada resaca
de esas de “No quiero acordarme”
en cada “Mañana será otro día”
que se pone en duda

Que te prometo intentar dormir
aunque pesen más los monstruos del espejo
que los que todavía guarda mi armario
congelándose conmigo
en cada ausencia

jueves, 14 de noviembre de 2013

Voyeur (Parte 3)

Una pareja de ancianos hacía la ruta a Oviedo. Iban juntos en el autobús. Iban arreglados, compenetrados hasta el punto de acompasar sus movimientos y toses otoñales. Abrigados hasta el extremo, preparados incluso para un invierno en Siberia, preparados para lo que parecía ser una mañana fría en la aborrecida Vetusta.

Lo primero que me llamó la atención sobre los viejecillos fueron sus paraguas. Eran los típicos paraguas pequeños y los llevaban cuidadosamente colocados en el agarradero del asiento. Era una curiosa y agradable imagen, ambos llevaban los paraguas exactamente de la misma forma y tamaño, solamente distinguidos por el color de la funda que los protegía. Parecía algo estudiado.

Lo segundo fue su forma de mirarse y de ignorarse, tan natural, tan familiar, tan limpia…Eran una especie de copia uno del otro, esa copia que surge de ser y estar juntos, esa copia a la que ni si quiera el mejor hermano puede aspirar. Debían llevar juntos desde que tenían edad para estar juntos. Estoy seguro de que en pleno diluvio serían la pareja escogida para llevarlos a un arca y salvarse.

Las parejas de antes no son solo parejas. Están cuarteadas por el paso del tiempo. Están cocidas a fuego lento. Han superado ya todas las crisis posibles. Y aún así están alimentados con esa tranquilidad que debe dar saber que cuando llegas a casa te espera la rutina, la rutina que tú elegiste. Una rutina con nombre de persona, con calor de hogar.

Entonces, te das cuenta de que solo la muerte va a separar a estos “viejales”. Que sí, que suena aburrido y poco moderno, pero hoy en día son unos auténticos rebeldes en plena dictadura. En plena dictadura de la inmediatez, del usar-y-tirar, de la fugacidad de la pasión. Ahí están esta pareja de robles aguantando el chaparrón, mirando desde arriba cómo se mueren las flores de un día.

En su caso, si que hay películas que recojan su historia, muchas, cientos de ellas. Pero  lo único que me gustaría es dedicarles estas líneas a estos vejestorios entrañables, deseando de corazón que su visita a Oviedo no haya sido para ir al hospital y que solo les separe la muerte. Eso sí, dentro de muchos años y de muchos viajes a Oviedo o donde les deje el tiempo.

Nosotros mientras aspiraremos a ser jóvenes eternamente, a ser modernos, a no ponerle nombre a nada para que las palabras no nos hagan esclavos. Mejor ponerle emoticonos que palabras a las relaciones banales que tenemos cada día. Pobres de nosotros cuando no tengamos con quien toser a la vez en otoño. Pobres de nosotros cuando llegue el diluvio universal.

jueves, 7 de noviembre de 2013

Ojalá el mundo, ojalá tú, ojalá yo, ojalá nadie

El mundo que sigue girando para los mismos  y yo que me sigo girando al paso de las mismas

***
Y no, no entienden de cerveza porque de verdad hay que tener valor para estar ciego a mi manera… y mucho más a estas horas

Yo me sigo sentando al lado de la primera que veo en los trenes, no soy distinto a ti, ni a ella, ni a ellas, me muevo por instintos prácticos, los peores

Y más vías, más estaciones, más trenes, más destinos ficticios para huir de distintos golpes

Resuenan en mi cabeza sus últimas frases: “Solo miras hacia delante” y yo pensando que si miro hacia atrás no hay más vacío y no, no quiero volver a mirar a los ojos al vacío

Que Proud Mary keep on burnin’ que no te vayas esta noche porque nunca te has ido de mi cabeza

Y yo no puedo hacer más que tomarme otra cerveza o simular otra guarrada de esas de follarse hasta la última gota de tinta del bolígrafo, mientras queden kilómetros

Que si Robe, morir, salir, el rollo de siempre, que si Joaquín, los Te necesito que perdí son los peores, los nunca dados, que si Madrid que en cuanto esto acabe nos vamos

Y “Fin de la cita” como dijo el más cuerdo de los tontos

Vida a la contra en la carretera, todo por el miedo a tus piernas disfrazadas de hogar y volantazo

Vida a la contra en la autopista, todo lo que viene se va, dijo el feo de Pereza, a golpe de volante

Y yo que ni si quiera se conducir,
No soy más que un copiloto de lujo en una camioneta que no conduces tú.

***

Ojalá nos estrellemos.

viernes, 1 de noviembre de 2013

"Vuestra libertad" de Pablo X. Suarez



VUESTRA LIBERTAD
(discurso político-moral)

¡Ay, y tenéis la boca completamente llena
de esa mierda que llaman libertad!
¡Libertad! Lanzáis al aire abstracto la palabra
como quien lanza besos a chicas lejanas.
¡Ay, y cómo se os queda la boca
llena de mierda! ¡Llena de libertad hasta los topes!
¡La libertad os chorrea por los labios como mayonesa
ardiente!
¡Libertad
para comprar gayumbos de calvin klein!
¡Libertad
de comer en mcdonalds a diario!
¡Libertad para Hollywood, para deglutir su bazofia eterna!
¡Libertad para que Amarrosa

sea la reina de las mañanas!
¡Libertad para todos los gilipollas!
¡Libertad, esa es vuestra libertad!

¡Pero me limpio el culo con vuestra libertad!
No quiero ver ni oir libremente gilipolleces
mientras me sea posible.
¡Ay, si yo fuera dictador de esta tierra algún día
prohibiría el pop romántico y el mismo polvo que pisasteis!
¡Prohibiría vuestro aliento y vuestras vespertinas
partidas de parchís!
¡Dios, prohibiría la luna y el sol si pudiera!

Y desde vuestros salones proclamáis
—y otra vez se os llena la boca de mayonesa ardiendo—:
«¡el dinero no da la felicidad!»
pero el dinero sí que os proporciona libertad
VUESTRA LIBERTAD
y cual perros adoráis la libertad que elegisteis.

¡Ay de la libertad de los pijos y de los soplagaitas!
¡Me limpio el culo con vuestra libertad!

Ausencia, carretera y viceversa


"Me llené de Romas
para poder caminar tranquilo por los caminos,
tu mirada seguía allí,
presente, vacía y  a la vez, ausente,
ya sabes"



http://delaspalabrasbonitas.blogspot.com.es/2013/11/ausencia-carretera-y-viceversa.html

domingo, 27 de octubre de 2013

Lou Reed



Dejé destapado mi bolígrafo
y pensé que nunca podría volver a escribir
-si me quedo seco-

Entonces,
el mito de los días perfectos
había pasado a mejor muerte
que esta

Pensé en las fotos con colores extraños,
el rock que dejó experimentarse
sin ningún tubo o local de ensayo

Los plátanos con clase,
lo ”Underground”,
la dulce Jane de pie
en una esquina

Hasta el domingo
se pinta de lunes
cuando quiere recordarnos
que cualquier tiempo pasado
fue mejor

Porque no mentías con eso de:
“You just keep me hanging on”
uno recoge lo sembrado

Pues la heroína no llevaba capa
ni nos salvó de la vida
y no, ningún hombre puede ser libre

Pero puedo afirmar sinceramente
que si algún día fui feliz
fue sin dudas por uno de esos días perfectos
de los que cantabas

Y que por suerte
-para ti-
la vida solo sirvió para morirse
aunque, a pesar de la muerte,
la chica de mis sueños
siempre bailará “Sweet Jane”

lunes, 7 de octubre de 2013

Banderas rotas


“Lo único que me molesta del viento es que agite las banderas” Batania Neorrabioso


Hoy te ví rota
yo estaba sentado
tú  mirabas por la ventana
con los ojos a punto llover
el viento lo movía todo
-todo-
menos la banderas

Lo mejor de las banderas
es que ponen color a las mentiras
lo peor de las banderas
es que no pueden abrigarte por las noches
y lo cierto es que eres la única patria
por la que me partiría el pecho
y la única que quiero abrigar
aunque sea a media asta

Y eso que los inviernos
vienen precedidos
de estas hojas rotas
que me caen de tus lágrimas
cada vez que escribo

Y eso que a pesar de todo sigues rota
y no tuve el valor
para arrimarme y decirte:
“Eres la jodida razón de este desastre”

Lo peor de las banderas
es que no tienen tu boca
y así no hay un himno nacional
que diga nada cierto

Lo mejor de las banderas
es que el viento no las mueve
como lo hace con tu pelo
y eso te hace ser mejor que cualquier patria
eso te hace ser mi mundo
y yo no quiero más mundos
que los que empiezan y acaban en tu sonrisa

Así que haz el favor, no vuelvas a llorar
que las lágrimas apagan el fuego
y aún nos quedan muchos incendios
-de esos nuestros-
para quemar de largo todas las banderas

domingo, 29 de septiembre de 2013

Ser, estar y lo que surja


Y al final la vida, nos enseño lo mismo  que las calles
No confíes en nada, no confíes en nadie
Todo se muere, todo se cae, todo es polvo:

Yo soy polvo
Tú eres polvo
El es polvo
Nosotros somos polvo
Vosotros sois polvo
Ellos son polvo

No hace falta demasiado viento para hacer volar al verbo ser
No hace falta mucho tiempo para dejar de tener la sensación de estar
Y solo son necesarios unos cuantos golpes para que te de igual qué parecer
No importan los adjetivos  ni los nombres que les pongamos, lo que nos marcan son las  acciones, son la sensaciones, son los verbos y más cuando se trata de estar y mucho más cuando se trata de ser.

De estar sin ti, de ser sin ti y aún así parecer que existo. Muero lentamente, luego existo, escribo luego existo y pobre de mí. Esta es la herencia de tus lunares, un lunático que vive en un cielo estrellado contra el suelo. Un suelo que vive cabizbajo mirando a tus estrellas. Un sinsentido, un desastre que creyó ser uno más cuando te tuvo entre sus piernas. Y qué bendición  escuchar tan de cerca gemir a los ángeles. Que crueldad recodar a lo lejos tu canción tu equipaje. Yo no lo llamaría estar,yo no lo llamaría ser, a esto yo lo llamo perecer.


Yo ya no quiero proyectos de vida, ni de ley, ni de hogar. Yo ya no quiero ser, estar ni padecer tu ausencia. Yo solo quiero sudar sueños, arañar el mapa de tu espalda hasta perderme, despertarme en las noches y ver que estás, eres o pareces. Y con eso basta. Con esto ya  no quiero enseñanzas de vida ni de calle. No quiero consejos de amigo ni de nadie. Con esto te quiero a ti y lo demás, sucedáneos. 

lunes, 23 de septiembre de 2013

Blues de la redención


 Todas las historias
acaban o empiezan en autopistas
donde se ven señales
que al final son adornos
de una civilización en decadencia

El sol alumbra sin sentido
corriendo por los kilómetros más sucios
del infierno (o del cielo)
dejando atrás demonios y soledades

Vuelvo a pensar en irme
por no pararme a entenderla (a entenderlos)
mi orgullo no es un ángel
ni un pájaro liberado de sí mismo
pero en días como hoy parecen brotarle alas

Aunque esta vez no me iré
voy a quedarme hasta el final
y que se apaguen las luces
y la música deje de sonar
es mi opción de rebeldía

Una barricada de sueños a la deriva
a los que me agarro en los  naufragios
a los que me someten tus lágrimas
solo un montón de sueños apilados
de los que tiro por las noches
mientras vuelvo a partirme el pecho por ti

Por que vuelvas aunque sea
en pequeñas gotas
de ese veneno sonriente
que me destroza poco a poco
por dentro

Me quedo con tu parte
mientras duermo
pero por favor “Despiértame
cuando acabe septiembre”
aunque suene un poco ridículo
y a canción fácil

Hazlo más pronto que tarde
para que no duelas
ni me des una razón más
para volver a vivir ( o morir)
en la carretera

Para no vender más
mi alma al diablo
en un cruce de caminos

Para que nada de esto pase
o pase todo, como tu pasas
a fuego por mi tripa y mis ganas
y nos digamos sudorosos
y ya calmados:
 “No te salves”
antes de volver a dejarnos el alma
en las cunetas de esta cama por civilizar



sábado, 7 de septiembre de 2013

Coños y Mariposas

Las mariposas de mi estómago son aún orugas, están muertas o simplemente me sobrevuelan en forma de gastritis…

Mira que me avisaron que no era la más indicada, pero lo cierto es que está muy feo señalar a la gente con el dedo, y yo de verdad, que cuando se trata de ella, soy todo un caballero

A decir verdad y siguiendo con el tema de las mariposas, es cierto que ella se compró (no me digáis donde) un caza-mariposas y cazó todas las que vio que me nacían. Con el fin, supongo, de colocarlas en una exposición dedicada a las primaveras muertas de los hombres  que, como yo, intentamos robarle algo más que un beso de la boca

Y yo como nunca supe acabar mis colecciones, decidí escribirle esto para que lo archive bien e incluso lo cuelgue en su portal a modo de esquela o de epitafio;
Dirá de mi orgullosa: “Hizo lo que pudo”
Otras dirán satisfechas: “Hizo lo que quiso”

Pero yo en realidad no diré nada
y tendré que volver a sacar un atisbo de fuego
de las cenizas que dejaron sus piernas

A quemar atardeceres
con mi hielo

A empezar a unir lo bonito y lo absurdo
que es decir “Te quiero”
cuando estás comiendo el coño equivocado

A pedir perdón y permiso
después del polvo
el permiso de después, recién encendido
para irme contigo (o sin ti)
pero no volver

Así mis mariposas se fueron muriendo, por no tener supongo, una flor donde posarse por las noches y entonces, solo entonces, pude llegar a julio entre otras piernas

Y decirle (Y decirme):
“Que las mariposas solo viven un día
y no están hechos los días para no dejarse posar
en otras flores”

lunes, 26 de agosto de 2013

Voyeur (parte 2)

Vagaba por la calle como cualquier jubilado pero con la humilde expectativa de vivir muchos años más. Mi atención como siempre iba encaminada a esas personas que son capaces de soportar a otras personas, es decir, a casi todo el mundo en sus cabales. Esta vez mis ojos se detuvieron en una pareja (para variar). Pero la pareja en cuestión no era una pareja joven ni agradable a la vista, posiblemente nunca saldrían en ninguna película, ni en televisión y menos mal.

Él un hombre de unos cincuenta años, estatura media y visibles problemas de sobrepeso abrazaba a su susodicha y la besaba con pasión exacerbada. Ella una mujer de edad y estatura similar a su amante y de proporciones también abundantes, continuaba el beso de su querido hombretón.
La pareja se fundía en un repugnante beso y puedo prometer que nada tenía que ver con su apariencia física. Más que besos podría decirse que se succionaban la boca mutuamente, parecía que iban a absorberse de un momento a otro. Se relamían y juntaban sus babeantes bocas una y otra vez, como dos quinceañeros descubriendo una parte oscura del noviazgo.

He de admitir que la escena me revolvió el estómago y me dejó con un sarcasmo que me hacía ver mi ridícula tarde de una forma mucho menos patética. Aún así volví a mirarles mientras cruzaba la calle. Mi cuello casi se iba a girar por completo y mis ojos parecería que fuesen salirse de sus órbitas, pero mis Ray-Ban estaban para salvarme de la embarazosa situación y disimular.

Allí seguía la curiosa pareja, devorándose, regodeándose en saliva ya adulta. Mientras se palpaban y agarraban con fuerza sus cuerpos sudorosos y grasientos, sin dejar un respiro a los observadores de mala tinta como yo. Era un precio que estaba dispuesto a pagar. No sé cual es la forma idónea de envejecer pero desde donde yo les veía, puedo dar las gracias por no haber sido partícipe de aquel festín.


Lo que sí puedo deciros es no que ví ningún atisbo de vergüenza o infelicidad en la pareja. Al fin y al cabo, no eran jóvenes, no eran atractivos y no besaban muy bien, pero por un momento (quizás demasiado largo) esos cabrones fueron los reyes del mambo. Y creedme seguro que esa pareja se merece algo más a que un perdedor como yo cuente su historia, tan digna y tan libre como las de los demás. Que no cesen los besos guarros, ni la gente deje nunca de ser feliz, sea como sea.

martes, 30 de julio de 2013

Ni un blues ni nada parecido

Construyo mis creencias en base a derribos y escombros;
 y creedme así no hay bastardo que me diga que hay futuro

Joder,  mira que hay borregos que reniegan de su clase aunque no falte nunca su nombre en la hoja de firmas

Igual que tú, que te me apareces en forma de verso libre y así tampoco hay nadie que me diga que hay futuro… o libertad
Será mi cruz que tu cara sea la que tache y a la vez escriba poesías que ya son más tuyas que mías
Y volverán las autopistas a correr sin tus andares
Ya me dirás lo absurdo que son los kilómetros sin un centímetro cuadrado  de tus curvas
Pueden cortarse carreteras con tu fuego, puedes crear barricadas y cargártelas todas con solo una sonrisa

Y así tus ojos cerrados abren mi mundo a una absoluta destrucción;

-Oír  tus susurros, tus treguas
-ver tus sombras, tus luces
-Y callar tus dolores

Y así todo, así es como no se escribe un Blues ni nada parecido
Así es como tú, mi mejor recuerdo, te conviertes en olvido
Malgastas tu orgullo con un perdedor cada sábado
Y no puede ser que se caigan todos los mitos,con todos mis discos dentro
No puede ser que tú te vayas esta noche,
No puede ser esto un Blues ni nada parecido.


jueves, 18 de julio de 2013

Y el viento calla

Retumban en mis oídos silencios
Que son lápidas de palomas
Volando para huir de lo que no fueron
Corriendo por autopistas incendiarias
Que solo son cortadas por barricadas
Por cuerpos rendidos, por la sangre de un pueblo
Que no se atreve apenas a decir que es un pueblo
Y el viento calla

Chilla, vocea, me desgarra los tímpanos el tiempo
Tic tac, tic tac, agujas del reloj, agujas de oro
Para que brillen los vencedores de la historia
Con sus vidas bañadas en plata, con sus versos llorones
Hablando de amor y besos porque lo demás les sobra
Porque no les hace falta recordar quien son sus padres
Para abrir sus sucias bocas
Y el viento calla

Acordes que se meten en mis oídos
Son sus canciones que impregnan la radio
De su libertad plastificada y artificiosa
Para cantarle a Sally y a chicas que no existen
Mientras a su lado su vecina llora solitaria
Mientras el hombre blanco vuelve a golpearla
Y el viento calla


Arden las calles y arde la selva
Se queman los silencios donde tiene no cabida
Un sufrimiento dicho en zulú
Un dolor que tiene color, un color que tiene dolor
y tiene culpables, mejor dicho, responsables
Que con su indiferencia incolora
 Llenan las cárceles de hombres nobles
Y el viento calla

Se deshace nuestro mundo,
 Para construir el suyo
Así se construye el apartheid
Construyendo muros
Levantado escopetas
Elevando al hombre blanco a la categoría del cerdo
Y el viento calla

No me llames blanco
No me llames Europa
Si yo formo parte de su sucio mundo
De su sucia mafia incolora y detestable
Yo soy de los de abajo y abajo me quedo

Aunque calle el viento
Aunque queme el sol
Yo soy ellos y ellos son yo
Que se joda el viento
Que ya traerá los sueños
Que tirará los muros
Y al fin seremos libres


Quise escribiros y no supe
Una canción protesta
Un poema, quizás unos versos
Que en el fondo nos detestan

Quise escribirlos y no pude
Por miedo a encontrarme
Y no gustarme el resultado
Por no pasar de ser el que margina
Al marginado

Quise hablar de Madiba, del Apartheid,
De romper fronteras
pero no supe hacerlo
Porque sigo viendo allá donde paso
Fronteras y apartheids

Quise hablar del cambio y no pude,
porque el apartheid sigue existiendo
ya sea en forma de disco pirata, de bolso, de reloj,
de pulsera, que se vende en los bares
y el blanco compra con una sonrisa compasiva
con una superioridad repulsiva

 Quise hablar de un mundo global
Donde no fuese más libre el dinero que la gente
 y prefiero callarme
Para no engañarme
Para no engañaros

Quise hablar de integración
y me resulto imposible
porque la integración se desintegra
cuando unimos a la gente
desuniéndola en guetos
creando clases sociales
creando esclavos del odio

Quise hacer todo esto y no lo haré
Para no contribuir a la gran mentira
 De la igualdad en nuestro tiempo
No vaya a ser que alguien piense
Que con nuestro particular apartheid
Tocamos en el techo

Y volvamos a caer

sábado, 13 de julio de 2013

Mira que hay canciones cantadas por mudos que no se atreven a decirse a sí mismos que se odian en la radio

Mira que hay poemas en el mundo que bien podrían ser abrazos o bienvenidas y no lo son por miedo a que duela no ser correspondido

Mira que hay billetes y monedas que no ponen el cartel de “ida y vuelta” porque solo se van hacia los mismos de siempre

Mira que hay aviones que despegan y ninguno parece querer sentir apego a las lágrimas que pueda dejar en sus tierras

Mira que hay escritores y podría haber hombres felices que no tengan que pasarse la vida escribiendo lo que no dicen

Mira que hay guerras y rebeliones cada hora y nos llevan repitiendo las mismas a lo largo de la historia

Mira que hay solitarios creyendo que no son solitarios mientras mensajean con su móvil a una persona que le ignora

Mira que hay personas libres en la tierra y ninguna de ellas es consciente de la velocidad de sus piernas para huir de sus cadenas

Mira que hay flores y oportunidades de olerlas y siempre tenemos que esperar a que se ponga todo de color negro para regalarlas en forma de ramo o de corona

Mira que hay tiempo y hay labios que besar y siempre tenemos que pasarnos la vida creyendo que nos corresponde uno solo


Mira dijo el ciego, escucha dijo el sordo, no te calles dijo el mudo, y al final por no mirar a tiempo tuvimos que escuchar todo esto

viernes, 21 de junio de 2013

Autoayuda

A ver si va a resultar
Que desde la ventana para los demás
Es siempre un poco más verano
El sol sale un poco más
E l tiempo duele un poco menos
Y siempre hay menos nubes en el cielo

A ver si va a resultar
Que despertarse es más bonito para otros
Aunque cuando lo hagan
Su soledad ocupe un cacho más que la tuya
O que acostarse en camas ya deshechas
Resulta un placer para los cielos ajenos

A ver si va a resultar
Que su tiempo tiene más segundos
Y siempre llegan primeros
Que sus vidas están más llenas
Que no les duele caer
O que su vacío pesa menos

A ver si va a resultar
Que eres tú el que no sabe
Y siempre son mejores los demás
O quizás resulta que todo es tan sencillo
Como cerrar la ventana , darse una tregua
y simplemente continuar.

martes, 18 de junio de 2013

Qué sé yo

Desastres nunca organizados por toda la habitación
Hasta las paredes parecen haber dejado de escuchar
Las sábanas llenas de oleajes y dunas que buscan ser libres
El techo que nos mira como si quisiese tomar partido en esta guerra
Esta guerra donde siempre vamos a  caer rendidos
Donde las trincheras, son tus silencios y mis olvidos
Y solo gana quien se atreve a mentar la última palabra
Y solo pierde quien se inventa un adiós
Por no saber decir hasta luego

Y qué sé yo
Qué sé yo que tú no sepas
Qué sé yo que de los ríos que no fluyen por tus piernas
Qué sé yo de los míos, yo no crecí en las afueras
Yo crecí donde el viento lanzaba navajas al cielo
Yo viví donde la gente vivía la vida matándola
Yo moriré donde el tiempo se olvide
De que es tiempo

Y qué sé yo
Qué sé yo del tiempo
Yo solo sé improvisar estas líneas

Y qué sé yo
Yo apenas sé invertirlo en matarlo juntos
O separados
Pero matarlo un poco
Para que no duela
Para que no te salves
Para caer de nuevo
Y que me enseñes a escribir poesía en tu espalda
Cada noche
Poesía de arañazos y dudas, de mordiscos y precipicios
Poesía del pobre y del olvidado por si mismo
Poesía sin versos que se atrevan a rimarla
Sin policía que se atreva a detenerla
Sin martillo que pueda derribarla
Así es mi poesía irreductible
Como mis dudas
Como las ganas que yo tengo que de echarla abajo
Cada vez que te marchas
Qué sé yo

domingo, 16 de junio de 2013

Reflexiones de autopista (1)

Creo que si la felicidad está en alguna parte se consigue restándole importancia a las cosas. Por eso creo que lo más bonito que se puede decir a alguien es: "No eres lo más importante para mi, estás a años luz de serlo, pero aún así voy a quedarme esta noche y vamos a ser infinitos". Y con eso basta. Lo demás son mentiras. Lo demás se lo carga todo. Las promesas y las palabras son más un opio que una certeza. Y es lo que queda cuando no tenemos más que dudas. Y generalmente dudas es lo que más tenemos.Y así nos va. ¿Quien quiere vivir sin dudas? ¿Quien quiere vivir dándole a las cosas más valor del que tienen?

sábado, 15 de junio de 2013

Botellas vacías


No importa cómo está la ciudad esta noche
Has dejado un vacío en el vacío, y no volverás para sanarme
Aunque quisieras ser la que me salve
Aunque sé que tu eres experta en arreglar mis desastres
Aunque lo admito todo doliéndome
Sé que no estás en las nubes que me nacen
Ni en las gotas de lluvia que se mueren
Cuando acaba Mayo entre mis sábanas

Da igual, si tu preciosa sonrisa me hace feliz
Estoy roto, y aún no hay remedio para mi quema
A este perro callejero se le acaban los motivos
Y eso que podría tenerlos, sin inventarlos en demasía
Y eso que los adioses podrían ser bienvenidas
Y mis brazos dejaron de quererte en aquella oscura avenida
Da lo mismo porque llenaste mis silencios de domingos por la tarde
Sin un Sábado, que se te escapase entre los dedos
Y da igual, da lo mismo, si somos observados por el Gran Hermano
Orwell no quiso amores imposibles pero creó mundos
Como los que creas cuando me acaricias

Quizás me bastaría con saber, si tú te llevas algo de esto
Si somos algo más que la complicidad de una cerveza con tus labios
Me bastaría con saber que existes, si al menos para ti ha sido bueno
Aunque me quede con mis deudas insalvables con las autopistas
Llenas de desengaño e insatisfacción, desgarrando mi espalda
Arañando sueños, si es que queda alguno esta noche
Para dormir aunque me faltes, para morir aunque me nazcas
Para seguir cuando te canses

sábado, 8 de junio de 2013

Militante de tu pelo


Mi cuerpo se hace viejo, lo dicen mis heridas curándose, mi rostro, mi luz, mi espejo, no soy el de antaño (ni quiero); soy algo parecido, como un reflejo

Sigo aquí, por si acaso me quedan las migas del pan que el cielo me regala con tus piernas, pero no, no quedan ni las migas, ni el recuerdo

Solo queda vacío para llenar mi mundo, cuadrado, ridículo, mi mundo redondo y absurdo, contradictorio, autodestructivo, así es mi mundo

Voy errando por las estaciones y el tren no se para o se para demasiado y tus pecas ya no dicen que me quede, ni las chicas me dicen que me quieren

Es el diablo que se pone tantas veces de su parte, y ya ves apenas me quedas tú y el arte, el arte de esperarte en lo sueños, como esperan los vencidos

Como esperan los que no tienen más vida que las que nos dejan los otros, los que nos dicen que somos mejor de lo que somos, para que no cambiemos

Los que no quieren que les quitemos su trozo gigante del pastel que es más nuestro que suyo, ni admiten que el sudor en la frente sea la auténtica ley

Sigo sabiéndome un siervo que nada le debe a nadie, un siervo de mi
mismo si acaso de tus naufragios de los que yo quisiera ser la marejada una y otra vez


Y esa es mi paz, la paz del vencido, la paz del hijo del obrero, que no tiene patrón ni militancia, del que no reniega de lo que es pero que quemaría todas las banderas que no fuesen tu melena al viento

domingo, 2 de junio de 2013

(De)Mente

Mi mente te construye
como se construyen los castillos
tropezando con la misma piedra
y defendiendo con uñas y dientes
el derecho de que una mujer
sea mi reino y sus súbditos
 cada uno de mis versos

Mi mente que está loca te busca
de la cabeza a los pies
para besarte, sudar juntos lo sueños
y caminar descalzos en un mundo
donde nos meten la fe con calzador

Mi mente paranoica recuerda tus ojos
llenos de primaveras y vida
que se cargan de largo todos los inviernos,
luego tu boca que apenas deja leer entre líneas
la palabra “Derrota” y me hace de algún modo
Nunca bajar los brazos

Mi mente nostálgica se cuelga de tus caderas
que alimentan el vaivén de los silencios
y los hacen hablar, incluso recitar un poema
donde tú eres la tinta que tatúa en mi espalda
los versos de la historia jamás callada

Mi mente derrotada toca tus manos lluviosas
toca con la yema de sus dedos tus pies descalzos,
tus pies cansados de caminar, tus pies insurrectos,
 que se niegan a pararse cada noche y que por suerte
(para ti) nunca caminarán al mismo paso que los míos

martes, 28 de mayo de 2013

Los mitos y el fútbol


Soy de esos hinchas que van al estadio una vez al año y encima tienen la desfachatez de quejarse. Soy tan forofo de los equipos que solo simpatizo con los jugadores cuando los siento míos; cuando resultan hablar los códigos de mi barrio, de mi gente, la gente humilde que mete goles por no encajar los goles que la vida le marca.

 Soy de esos que son tan fieles que disfrutan viendo los goles del rival en campo contrario, y los sufre con el equipo pequeño y batallador cuando juega en su casa y su gente les arenga. Soy todo aquello menos lo que la hinchada quisiera y soy de todo menos neutral, aunque al extremista le duela. Estoy condenado a sufrir  por defender los mitos.

Por defender los mitos, las delanteras míticas del barrio, el tuya-mia, el rey de la pista. Hablo de lealtad,  de amigos de toda la vida. No hablo simplemente de fútbol. El fútbol en sí es aburrido, pero cuando se juega y cuando lo sientes en la calle, cuando lo sudas y te duele, entonces el fútbol deja de ser fútbol y se convierte en amistad.

 El fútbol no son goles, sino el abrazo de tu amigo que acaba de ser Maradona por un segundo. El fútbol no son árbitros, ni fueras de juego. Fútbol es hacerle un caño al chulito de la calle de enfrente. El fútbol es robarle un balón al superclase del barrio. El fútbol es ser cuando no eres.

 Y así nació el primer pase de la historia, cuando el hombre se creyó niño y le arreó una patada a una pelota. Sabiendo que hacía años que había dejado a la infancia bien atrás. Pero entonces otro loco le responde, y después otro y otro, y acaban por ser veintidós hombres que juegan a pasarse una pelota como chicos. Entonces deciden marcar los goles y resulta que marcando goles, no eran niños, ni hombres, ni falta que les hacía, marcando goles eran eternos. Y así nació en un suburbio londinense el football.

Nadie sabe quien fue el primer goleador de la historia, pero su grandeza, es que nadie lo sepa, que no supiera que iba a ser histórico, solo él supo su alegría, solo él disfrutó su gloria interna. En un mal grito, el cansado obrero de la fábrica de textil grito “Go!” y desde entonces se marcan goles.  Así hoy cada vez que un chico le emule, marcando goles, se convierte en eterno en histórico y nadie lo sabe. Y esa es la grandeza de fútbol la que ningún jeque podrá jamás comprar. 

sábado, 11 de mayo de 2013

Microcuento del deshaucio


"No sé", murmura Manuela compungida. Yo le contesto como siempre haciéndome el interesante " ¿Quién sabe nada?". Nos encanta filosofar mientras contamos los céntimos que nos quedan en la cartera, mientras contamos los días para que vengan a desahuciarnos

 Está lloviendo, es invierno y ya no nos dan la paga.No somos críos, nos sentimos unos chicos que acaban de empezar, pero lo cierto es que ya estamos en el fin de nuestras vidas. Lo peor de todo es que es invierno o eso nos dice la tele. Lo peor de dudar cuando no nos quedan ya ni dudas es que cada día somos más nada. Y duele, no tener nada duele. Duele no ser la cara de la noticias, duele ser la cruz en los telediarios.

No podemos pagar lo que somos, ya nos hemos vendido bastante.Es triste pero no quedan fuerzas que venderles. Duele porque nadie nos representa, no sabemos ni quien somos, pero el caso es que nadie quisiera ser nada parecido a nosotros. Duele la caída porque volamos demasiado alto, duele porque soñamos por encima de nuestras posibilidades, duele porque juntos no somos más que asfalto. 

sábado, 27 de abril de 2013

Las gafas de Viernes



La noche ha caído en esta ciudad, en este barrio lúgubre y silencioso. Parece que la luna y las estrellas han encontrado algo mejor que hacer que salir esta noche. Si fumase, fumaría en la ventana pero como no me ha dado por caer en ese vicio me dedico simplemente a contemplar la glamurosa vista que ofrece mi ventana; un glamur sin más estrellas que las que simulan ser las viejas farolas. De entre todas ellas hay una farola que debe estar estropeada (pero solo por momentos) porque tan pronto deja de iluminar como de teñir de negro a todo el paseo nocturno. Este incesante movimiento de luz otorga una viveza envolvente a las sombras que ahora ya campan a sus anchas en la fría noche de viernes.

Ser miope es una suerte en momentos como este, ya que solo los miopes podemos elegir la forma de ver el mundo solo con ponernos o quitarnos las gafas. No es tan estúpido como parece a primera “vista”. He querido probar como verían mis pequeños ojos este patio tan vagamente iluminado y creo que he visto mucho más (y más lejos) de lo que puede observarse desde cualquier lente.

 He visto a las sombras iluminar la realidad, uniéndose a los objetos. He visto a los jardines convertirse en lagunas oscuras. He visto la estrella polar en un haz de luz artificial .He visto animales mitológicos en forma de una bolsa a la que el viento hace bailar suavemente. Lo confieso he visto la más absurda realidad sin si quiera ver nada. Me he dado de bruces conmigo mismo. Weeping Willow. He roto el silencio: para que los sauces llorones de mi jardín sonrían de una vez por todas. Y para de una vez todos tus caminos me lleven  a Roma.

Suerte que puedo ponerme de nuevo las gafas y ver que nada de esto era mentira. Escuchar como la música nunca paró de sonar. Mirar que los sauces tampoco han parado de llorar aunque a ratos se echen a reír. Pues sí, este viernes oscuro me ha susurrado al oído que nada de esto va a dejar de suceder aunque cerremos los ojos o nos tapemos los oídos. El mundo no deja de girar y gira como queremos que gire. Tenemos la suerte de poderle acariciar. Tenemos la suerte de poder permitirnos cambiar. Tenemos la suerte de poder pelear. Tenemos la obligación de quitarnos las gafas para mirar de frente al mundo.